Una canción eterna Jean Carlos Centeno y Juancho de la Espriella

Letra:
Una canción eterna Jean Carlos Centeno y Juancho de la Espriella
Era Marin el ángel de camino
y Calderon la luna san juanera
Rosendo el trovador de Villanueva
y yo sin parrandear por que era un niño

El sol se levantaba más temprano
la luna era un farol sobre la sierra
me enamore de las peleas de gallos
un día que me sacaron de la escuela

No se que viento llego del norte y borro una huella
en la memoria de los cantores dejo el pasado
quedo en mi alma como un tatuaje la noche aquella
cuando cante mis primeros versos de enamorados

Cuantas guitarras quedaron sin voz
Fredy Molina y Octavio callaron
se fue Zuleta sin decir adiós
sin Alejo quedo, su acordeón solitario
se fue Zuleta sin decir adiós
sin Alejo quedo, su acordeón solitario

Se me paso la vida
soñando sin darme cuenta
hay veces siento tristeza, pero que va
cantando se me olvida
hay veces siento tristeza, pero que va
cantando se me olvida

Ay ombe Juancho
que sentimiento manito
y con esta canción
recordamos lo inolvidable

Los paisajes de arena y sol caliente
me hicieron soñador de tarde en tarde
deje de ser nu niño de repente
cuando llego el amor sin avisarme

Un nombre de mujer que no recuerdo
una cita de amor bajo la luna
teníamos de testigo el rió viajero
y el cielo amenazando con la lluvia

Creo que la luna y el sol salieron al mismo tiempo
cuando la música de acordeón se metió en mi alma
me fue robando la vida misma con cada verso
y un pedacito del corazón, con cada parranda

Cuantas guitarras quedaron sin voz
Fredy Molina y Octavio callaron
se fue Zuleta sin decir adiós
sin Alejo quedo, su acordeón solitario
se fue Zuleta sin decir adiós
sin Alejo quedo, su acordeón solitario

Se me paso la vida
soñando sin darme cuenta
hay veces siento tristeza, pero que va
cantando se me olvida
hay veces siento tristeza, pero que va
cantando se me olvida